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El agua es necesaria para todos los procesos metabólicos del cuerpo, transporta nutrientes a las células y elimina sus residuos. Hay muchos supuestos en relación al consumo de agua y en esta nota vamos a desmitificarlos.
MITO: Beber ocho vasos de agua al día.
REALIDAD: Es necesaria un buena dosis de hidratación diaria, pero la cantidad es algo personal. Ocho vasos al día es una cantidad arbitraria.
MITO: La sed no es un buen indicador.
REALIDAD: La sed es sin duda un indicador clave de hidratación. Siempre es bueno disponer de otros métodos para asegurarnos de que estamos hidratados. Por ejemplo, conocer nuestro nivel de sudoración.
MITO: El agua es la mejor herramienta.
REALIDAD: Para un entrenamiento moderado beber agua está muy bien. Pero si vas a realizar una actividad más intensa es recomendable una bebida isotónica o agua enriquecida con electrolitos.
MITO: No se puede beber demasiado.
REALIDAD: Demasiada agua puede causar hiponatremia, un trastorno que se produce cuando los niveles de sodio en sangre son extremadamente bajos.
MITO: Beber mucha agua te 'desintoxica'.
REALIDAD: No hay evidencia alguna de que un exceso de agua limpie el cuerpo.
Mantenerse hidratado es clave. Si realizas actividad física o estás expuesto a deshidratación la mejor opción es sumar a tu vida High Fuel. Con este complemento obtendrás una máxima hidratación que favorecerá tu rendimiento. No contiene contraindicaciones ni produce efectos secundarios.